RELATOS DE TERROR

 UNA PESADILLA HASTA LA MUERTE

Todos tenemos pesadillas pero ninguna va a ser tan terrorífica como la de Shelby Oswan una niña de 11 años.

Esta historia ocurrió en 1778 el 31 de octubre, en Oslo la capital de Noruega. Seguro que no la habréis escuchado porque nadie la cuenta.

Shelby tenía un padrastro llamado Aleksander con el que no se llevaba nada bien, una madre encantadora llamada Anneliese y su hermano pequeño Erik. Shelby era una niña que le encantaba tener sueños de cuentos que inventaba ella.

En 1777 el 30 de octubre ocurrió algo terrible, Aleksander intentó matar a Shelby, ella pudo escapar y fue a contárselo todo a su madre. Anneliese llamó a la policía corriendo y Aleksander fue arrestado. Al día siguiente el 31 de octubre la policía comunicó a la familia Oswan que Aleksander se había suicidado.

Pasó un año y llegó el 31 de octubre ¿y adivináis lo que pasó? A partir de ese día no paró de pasar desgracias en aquella familia.

La primera víctima fue... su hermano Erik. Shelby y su madre estaban tranquilas y de repente escucharon un ruido muy extraño, se asomaron por su terraza y vieron en la calle el cuerpo de Erik sangrando. Las dos bajaron corriendo las escaleras y salieron a la calle y el cadáver de Erik no estaba. Shelby y su madre no paraban de llorar.

Cuando llegó la noche, Shelby dijo: “Por lo menos mis sueños me acompañarán en la noche” Pero nada de eso ocurrió, Shelby empezó a tener pesadillas. En sus pesadillas se le apareció su padrastro que empezó a extrangularla hasta que la mató. Después unas manos transportaron su cadáver hasta un precipicio. Su madre escuchó unos gritos y fue al cuarto de Shelby, cuando entró vio a Shelby que estaba muerta y de repente se cerraron las puertas y las ventanas de la habitación. Los vecinos escucharon unos gritos y fueron corriendo a la casa de la familia Oswan. Cuando entraron no había nadie en ninguna habitación, solo había sangre. Desde aquel día no se escuchó nada más sobre la familia Oswan.

Y ¿quién sabe? A lo mejor el espíritu de Shelby está en tu casa, en tu colegio o aún peor escuchando cómo lees o como escuchas su historia. Y cuéntales a tus amigos que tengan cuidado el día de HALLOWEEN porque el espíritu de Shelby nunca descansará en paz.

Andrea 6º de Primaria